Un directorio distinto… Y muy nuestro

Seguro que recordáis cuando aquel político, ciertamente excitado por el resultado de la gestión, salió al balcón de su sede y gritó aquello de ¡Por fin somos europeos! Se inauguraba así una época excelente en la que España fue creciendo con rapidez, escalando puestos en la tabla de países desarrollados y dotándose de infraestructuras que eran impensables unos años antes. Digamos que nos imbuimos de espíritu europeo, y lo cierto es que todas las encuestas demostraban nuestro agrado por pertenecer a una entidad como ésta. No en vano fuimos de los pocos que aprobamos la primera Constitución comunitaria.

Sin embargo la crisis nos ha ido haciendo cada día más euroescépticos. En efecto, el sistema de fusión entre los países, con muchas concesiones a la soberanía nacional y muy pocas a la continental, ha impedido que algunas leyes se apliquen con efectividad. Tras la incorporación de los últimos países la UE quedó conformada por 27 naciones, y parece que la apertura a nuevos socios sigue siendo complicada (ahí están los croatas y los turcos intentándolo con denuedo). Y una de las cosas que más nos han sorprendido es la poca ayuda que se le presta a quienes hacen el día a día de la economía europea: las PYMES.

Afortunadamente la buena disposición de los propietarios de éstas ha contribuido a que se pueda seguir hablando de mantenimiento en el sector. Los negocios de nuestro país van adoptando nuevas fórmulas de darse a conocer, y ahora mismo están muy internacionalizados. Pero la difusión dentro de nuestras fronteras también existe. En efecto, gracias a páginas como buscadorde.es se pueden hallar todas las empresas españolas ordenadas por sectores y por provincias, para que así no tengamos ningún tipo de problema a la hora de encontrar a cualquier autónomo que nos pueda arreglar el jardín o hacernos un traje, por poner solamente unos ejemplos de los muchos que se pueden citar.

La verdad es que la entrada en la Unión Europea nos favoreció, qué duda cabe. Sirvió para que las estructuras se modernizaran, para que nuestra economía se pusiera a tono y para aceptar lo que entonces se conocía como modernidad. Ahora nos hemos dado cuenta de que aquello que nos vendieron no tiene tan buena pinta, por eso hay que estar del lado de los trabajadores, por supuesto, pero también de las empresas españolas que día a día se enfrentan a la crisis sin un gesto de agradecimiento por parte de nuestros gobernantes.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s