Por fin llegan las vacaciones y pasar unos días en la playa sigue siendo una de las opciones favoritas para muchos. Relajarte bajo los rayos del sol, dar un paseo por la orilla del mar, tomar algo en el imprescindible «chiringuito»… y si tienes un perro ¿qué piensas hacer con él?
Tu mascota es uno más de la familia (sobra decir que aquellos que abandonan a sus animales con la llegada del verano, no tienen nombre) y es importante saber si podrás llevarla contigo a tu destino de vacaciones. Haz click aquí y descubre cuáles son las playas «amigas» de los perros, aquellas en las que podrás compartir días de sol, arena y mar con tu fiel compañero.
Conocer la normativa respecto al acceso de animales a la playa donde piensas ir es fundamental para evitar disgustos en forma de elevadas multas. Cada comunidad autónoma, e incluso cada ayuntamiento costero, tiene sus propias normas. Ten en cuenta que en algunos lugares, está totalmente prohibido permanecer con el perro en la arena; en otros tienes horarios restringidos (puedes llevarlo temprano, cuando aún no hay bañistas, o a última hora de la tarde) y también puedes encontrar playas con zonas acotadas para que tú y tu perro podáis disfrutar de una jornada divertida e inolvidable (¡excelente idea!).
Fíjate en los carteles informativos que hay (o debería haber) en los accesos para garantizarte, así, que nadie vendrá a amargaros el día.
Por supuesto, el perro en la playa, como en cualquier otro lugar público, es tu responsabilidad, por lo que tendrás que hacerte cargo de su correcto «comportamiento». No solo debes preocuparte de que no suponga una molestia para los demás, sino también de todas sus necesidades. Vigila que siempre disponga de agua suficiente y recuerda que seguramente él no tenga ningún interés en ponerse moreno, por lo que es importante que cuente con un lugar a la sombra en el que poder refugiarse de excesivo calor.
Sea o no obligatorio, lleva siempre la cadena de tu perro a mano por si la necesitas en un momento dado (aunque tu mascota sea de lo más obediente, puede hacerte falta) y no olvides incluir en tu equipaje su documentación (cartilla de vacunación), que identifica a tu animal y demuestra que está sano y debidamente cuidado. Si además tienes un seguro de tu mascota (algo más que recomendable) lleva (o apunta) todos los datos y la información de tu póliza.
Con estos consejos y eligiendo el destino adecuado tú y tu perro podéis pasar el mejor de los veranos.