Cuando tenemos una conexión a Internet, un ordenador que responde a todas nuestras órdenes y algo de tiempo libre, podemos dedicar un tiempo a navegar por el ciberespacio; eso sí, la mejor elección será aquella que nos permita hacerlo con las máximas garantías y con la seguridad más eficiente posible (teniendo en cuenta que nadie está libre de un ataque cibernético, por muy bueno que sea el antivirus que tenga instalado). Por eso quiero comentaros cómo entiendo yo qué significan las palabras navegación segura. Tal vez cuando leas el presente artículo te pueda servir para que tú también rentabilices tus sesiones en la Red.
De entrada, lo que más me gusta es tener siempre a mano recursos que yo considero de primera magnitud. Por ejemplo, si busco empresas de cualquier tipo (un cerrajero o un fontanero de urgencia) lo que tengo que tener claro es que guiopolis.com me va a servir para mi propósito, porque es una Web muy intuitiva y sencilla de utilizar que me proporciona los mejores resultados con el mínimo esfuerzo. Y así con todo, de lo que se trata es de saber que este tipo de directorios de empresas son fenomenales para localizar rápidamente un recurso determinado.
Otra cuestión fundamental es comprobar que todas las barreras del antivirus funcionan a la perfección. Puede ser que nos hayamos descuidado y tengamos la protección temporalmente desactivada porque queremos instalar un programa y el cortafuegos o cualquier otra aplicación nos lo impide. Pero recuerda siempre volver a ponerlo en funcionamiento antes de iniciar cualquier navegación por la Red. Te vas a evitar un montón de problemas, te lo puedo asegurar.
Es importante que seas desconfiado. Huye de esas páginas que prometen un montón de recursos gratuitos, son un vivero de virus, troyanos y spyware muy perniciosos para tu ordenador. Y aunque la página esté libre de este tipo de problemas, todo lo que se ofrece suele ser contenido ilegal protegido por leyes con copyright. Cuidado con lo que te descargas de Internet, puede ser que no lo estés haciendo de la manera más correcta.
Por último, una precaución claramente dirigida a tus hijos: activa todas las protecciones posibles y enséñales a navegar. Si tenemos niños pequeños o adolescentes, sería conveniente que recibiesen de nosotros las primeras lecciones de cómo hay que desenvolverse en el complicado mundo virtual. Por desgracia hay muchos desalmados que están esperando la oportunidad para extorsionar de cualquier manera a los menores de edad; así mismo, muchas páginas pueden tener contenido violento o para adultos demasiado explícito, lo que implica que podemos correr el riesgo de que todas esas circunstancias estén disponibles para nuestros retoños. No quiero que entiendas que es sobreprotección, más bien pienso que se trata de llamar a las cosas por su nombre. Y si no quieres lamentarte, seguro que agradecerás que la navegación por Internet que hagas tú y tus hijos sea lo más segura posible. No te arrepentirás.
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